jueves, 25 de junio de 2009

Excava el pozo antes de que tengas sed. Proverbio chino.

De entre las jornadas, cursos y seminarios a los asistí obligado en la Universidad, recuerdo uno especialmente entretenido y corto (lo bueno si breve...). Se acortó porque ese día jugó el Real Madrid la ida de semifinales de liga de campeones con la Juventus, a la que ganó, poniendo (se suponía) rumbo a la décima. En el curso, “El Plan Hidrológico Nacional 2001”, varios técnicos hidráulicos, hidrológicos y ambientales nos contaron que después de años de trabajos, publicaciones y estudios ya estaba en marcha su Plan. Era mayo de 2003.

Un día como el pasado 22 de junio, pero de 2005 se publicaba en el BOE la derogación del Plan Hidrológico Nacional 2001 y del trasvase del Ebro incluido en él, (aunque, por supuesto la efeméride más importante de este día también es futbolera: los penaltis ante Italia). Esta derogación fue precedida del nuevo Plan Hidrológico Nacional 2005, que ha realizado varias actuaciones en la costa de levante. Anteriormente a estos dos se elaboró el Anteproyecto de Ley del Plan Hidrológico Nacional 1993, también conocido como “Plan Borrell”, que contemplaba transferencias de agua entre todas las cuencas peninsulares. Y mucho antes, el Plan Nacional de Obras Hidráulicas ordenado por el ministro socialista Indalecio Prieto en 1933 y durante la Segunda República, que tuvo gran influencia en las resoluciones hidráulicas de las décadas posteriores, incluido el trasvase Tajo-Segura.

Decir que un Plan u otro es mejor depende, porque según como se mire todo depende. Todos ellos intentan solucionar los problemas de las sequías, de la sed. ¿Qué hacer cuando uno tiene sed pero el agua no está cerca? ¿Cuándo uno quiere beber pero el agua no está cerca? ¿Conservar la distancia, renunciar a lo natural, y dejar que el agua corra? Una de mis canciones esta "Agua" de Jarabe de Palo.









Este grupo, formado en 1996 por Pau Dones, se dio a conocer al año siguiente con su canción "La Flaca" y gracias al spot de TV sobre el disco de Carácter Latino grabado en un tejado (dónde he visto yo esto antes). Aunque haya sido acusado (con parte de razón) de componer canciones prácticamente indistinguibles entre sí, entre sus 7 discos hay otras buenas canciones: "Quiero ser poeta", "Duerme Conmigo", "El lado oscuro", "Realidad o Sueño" y por supuesto "Grita".

Hace días que te observo
y he contado con los dedos
cuantas veces te has reído
una mano me ha valido.
Hace días que me fijo
no sé que guardas ahí dentro
a juzgar por lo que veo
nada bueno, nada bueno.

Hace tiempo alguien me dijo
cual era el mejor remedio
cuando sin motivo alguno
se te iba el mundo al suelo
Y si quieres yo te explico
en que consiste el misterio
que no hay cielo, mar ni tierra
que la vida es un sueño.

Dicen que unos 40.000 castellanos gritaron el pasado 20 de junio en Talavera de la Reina (Toledo), en la primera manifestación en defensa del Tajo, en contra del trasvase al Segura.

Transvasar, o pasar un agua de una parte a otra, era lo que hacían los romanos en Toledo con un avanzado sistema hidráulico que comenzaba en la presa de Alcantarilla, al otro lado del Tajo, y tras 55 kilómetros de canales y conductos acababa en aljibes en la ciudad, uno de ellos el conocido por la leyenda como "La Cueva de Hércules". Y para salvar el Tajo construyeron un magnífico acueducto, del que sólo quedan restos en las dos riberas del río, aguas arriba del nuevo puente de alcántara. Se han hecho varias hipótesis de cómo debió ser este acueducto de Toledo, alguna de ellas contemplando tres niveles, aunque la más aceptada es la del ingeniero Carlos Fernández Casado con un solo nivel y una altura de cincuenta metros, doce más que el de Segovia.

Es horrible tener sed y no poder calmarla. Por eso hay que buscar agua allá dónde esté, que hay hasta en los desiertos, que “Lo que embellece al desierto es que en alguna parte esconde un pozo de agua.” Antoine de Saint-Exupery.

lunes, 15 de junio de 2009

La esperanza es el sueño del hombre despierto. Aristóteles.

Acepte la oferta para mi primer cambio de empresa con un fin, comenzar mi primera obra civil, una carretera. Pero tras incorporarme a la nueva empresa los trámites previos al inicio de obra se alargaban. Dos meses y medio de espera hasta que al final, un día como ayer, 14 de junio, pero en 2004, se iniciaron los trabajos.

Un día como ayer, 14 de junio, pero en 1942, Anne Frank comienza a escribir en el diario que había recibido dos días antes por su decimotercer cumpleaños. La pequeña Anne, nacida en Alemania, tuvo que mudarse junto con su familia a Ámsterdam, huyendo de los nazis. Y desde el 9 de julio de 1942 hasta el 3 de agosto de 1944, tuvieron que ocultarse en un escondrijo, cuya puerta estaba escondida tras una estantería. Allí vivieron durante la ocupación alemana, esperando el fin de la guerra. Pero fueron capturados y llevados a distintos campos de concentración alemanes. Anne fue enviada al campo de concentración nazi de Auschwitz y, más tarde, al campo de concentración de Bergen-Belsen, dónde murió por fiebre tifoidea el 12 de marzo de 1945, pocos días antes de que el resto de presos, los que esperaron un poco más, fueran liberados. Su padre, el único de la familia que sobrevivió, tratando de cumplir póstumamente el deseo de Anna expresado en el diario de convertirse en escritora, decidió publicarlo.

“Podría seguir durante horas hablando de la miseria acarreada por la guerra, pero eso me desalienta más. No nos queda más que aguantar y esperar el término de estas desgracias. Judíos y cristianos esperan, el mundo entero espera”


Una pieza de teatro basada en el Diario recibió en 1955 el Premio Pulitzer de Teatro y en el cine en 1959 obtuvo tres Oscar. En febrero de 2008 se estrenó en Madrid, en el teatro Calderón, el musical El Diario de Ana Frank. Un Canto a la Vida.


En Toledo, la espera más narrada en forma de leyenda, es la de Doña Sol a su amado Don García, con el que se había prometido días antes de que este partiera hacia la guerra en las indias. Doña Sol confiaba y sabía esperar. Largos ratos dedicados a la oración en su capilla particular acrecentaba su esperanza. Pero pasaron muchos meses sin noticias y pensando que sus oraciones no eran eficaces, ya que no le hacían salir de casa, comenzó a rezar en una hornacina situada en la calle de Toledo ahora llamada Alfileritos, donde se mostraba Nuestra Madre Dolorosa. Y para no quedar dormida mientras rezaba, dio orden a una criada para que cuando el sueño interrumpiera su oración la despertara clavándole un alfiler. Luego introducía los alfileres por entre los barrotes de la reja, dejándolos allí a modo de ofrenda. Y así se sucedieron las noches, hasta que regreso don García y los jóvenes se casaron. Esta es la leyenda de la Virgen de los Alfileritos que se ha transformado en la creencia popular de que si una muchacha echa dentro de la hornacina un alfiler en la hornacina, pronto tiene novio.


La literatura y la música se han fijado mucho en la espera del amado. "Sucedió en la antigüedad"de "El Ultimo de la Fila" (ella salía a los caminos a preguntar), "En el muelle de San Blás" de Maná (miles de lunas pasaron y siempre ella estaba en el muelle esperando.), y la menos conocida "Mejor será que te espere" del grupo Oil y del album "Matando hormigas con la espalda" (mientras ahogo en alcohol la sensación de esperar y llegue al fin la ocasión y así poderte estrechar) pero la que me sigue poniendo el “vello de punta” es "Naturaleza Muerta" de Mecano (ya tocaba algo de mi primer grupo), escrita y compuesta por José María Cano originalmente, en el año de 1985 para el grupo Mocedades con el título Ana y Miguel. Pero José María no quedó muy satisfecho con la manera cómo Mocedades produjo la canción (ni yo tampoco, escuchádola en http://www.youtube.com/watch?v=WC_-29MrD9w con, por ejemplo, una guitarra eléctrica a mitad de canción), y fue reestrenada en 1992 para el album Aidalai.










http://www.youtube.com/watch?v=YnlbalZQyUs

Anne Frank simboliza la esperanza de seguir viviendo, y Doña Sol la esperanza de seguir amando. Pero ninguna esperaba con los brazos cruzados. La primera escribía y la segunda rezaba y, aunque no consiguieran disminuir el tiempo esperado, no desesperaron ni sufrieron en su espera. Se preguntaba Pablo Neruda. ¿Sufre más aquél que espera siempre que aquél que nunca esperó a nadie?